viernes, 3 de junio de 2011

CARTA AL VIENTO: LOS MEDIOS QUE CAMBIAN EL MUNDO

5 de junio

45º Jornada de Medios de Comunicación
CARTA AL VIENTO:
LOS MEDIOS QUE CAMBIAN EL MUNDO

Esta tarde, en mi parroquia, celebraré la misa funeral por un enfermero, José Manuel, a quien conocí gracias a este programa de radio y a la hoja informativa de la parroquia. Él me alentaba a no cejar en el sencillo apostolado de la comunicación hablada o escrita y me repetía: Muchas cosas pequeñas, en muchos lugares pequeños, hechas por gente pequeña, pueden transformar el mundo.
Este próximo fin de semana es la Jornada de los Medios de Comunicación Social. En  la Iglesia estamos acostumbrados a utilizar medios modestos a los que a veces no hacemos demasiado caso. Programas de Radio como el de la Cope con Alfredo Monagas  o  este de Radio Tamaraceite con Paco Mira  merecen nuestro reconocimiento. Y habría que hacerles más publicidad.  Pero me gustaría hoy detenerme también en  la siembra serena y necesaria  que hacen las hojas parroquiales, la mayoría desconocidas, pero que están haciendo su trabajo. Una hoja parroquial es un mensaje impreso que con frecuencia llega a muchísimas familias la fuerza del Evangelio, de la Buena Noticia. Pero es  un medio humilde. Es, como me decía José Manuel, una cosa pequeña que puede transformar el mundo. Me gustaría hoy recordar  la historia de tantas sencillas hojas parroquiales  que, a  lo largo del tiempo, en nuestras Islas, han cumplido con una tarea pastoral importante. La primera de la que se tiene noticia en nuestra Diócesis  se editaba en S. Mateo en el año 1914. Se titulaba “El Saucillo” y con este subtítulo: Hoja parroquial dedicada a fomentar  la religión y piedad en las familias cristianas”.  Bastantes años más tarde, en  los años 40 empezó a publicarse una hoja semanal titulada “Saulo, Saulo”, Hoja parroquial de San Pablo.
Pero si hay una revista parroquial  que destaca en nuestra diócesis, es sin duda,  La voz de la parroquia” que empezó a publicarse  en 1957 y llegó a tener una tirada de 16.000 ejemplares. El impulsor  de “La Voz de la parroquia” fue el sacerdote D. José Cástor Quintana Sánchez, hermano de D. Heraclio. Y la hoja se distribuía en diferentes parroquias de las tres Islas de nuestra Diócesis.
Entre las publicaciones  parroquiales  de los años 60 cabe destacar Verdad que se editaba  Melenara y Ojos de Garza y que tiene el honor de haber sido  secuestrada por la policía por algunos comentarios  con motivo de un Primero de Mayo. También es de la época la Hoja titulada  Pueblo Nuevo y que se distribuía en  La Pardilla de Telde, de la mano del cura Pepe Alemán, ya fallecido; Más tarde surgieron otras revistas parroquiales como Contacto, de Maspalomas-El Tablero; o  Tigotán, de Vecindario que por cierto se ha seguido editando en estos últimos años. O La Gavia que impulsó Pepecho en Fuerteventura o Rubicón en la isla de Lanzarote.
Es de valorar que las parroquias sigan creyendo que los medios de comunicación, los programas de radio y el papel impreso, son  un medios eficaces  para transmitir el evangelio y para ponerse en contacto con todos los vecinos, creyentes o no. De hecho, a pesar de los blogs y las páginas web, siguen naciendo otras revistas  que cumplen un papel  muy digno  como  puede ser Piedra Viva de Tamaraceite  o  El Puente en  Arinaga y Cruce de Arinaga. Y  hay compañeros, como el amigo Paco Martel,  que no cejan en su empeño de dejar cada domingo en el periódico, una gotita de evangelio. Seguramente es muy poquito lo que hacemos en la radio, en la hoja parroquial o Internet. Pero estamos convencidos de que, como me decía José Manuel, un hombre creyente y sensible a todo lo social por quien rezaré esta tarde en la misa funeral,  Muchas cosas pequeñas, en muchos lugares pequeños, hechas por gente pequeña, pueden transformar el mundo.
Al fin y al cabo, eso es lo que pretendemos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por participar.