martes, 22 de febrero de 2011

¿Qué esperamos de un obispo joven en la Iglesia?

¿Qué esperamos de un obispo joven  en la Iglesia?


Saludos para todos los buenos oyentes de Radio Tamaraceite Onda Parroquial. Después de la celebración de los primeros quince años de esta emisora, se siente uno muy animado por el respaldo que los vecinos de Tamaraceite y de la isla están dando a la radio. Ojalá que, los que utilizamos sus micrófonos, lo hagamos siempre con la responsabilidad  y respeto que esto exige y con el deseo de colaborar al bien de todas las personas.
     El presentador de este programa, Paco Mira, me pregunta que qué espero de un obispo joven en la Iglesia. Tendría que decirte, Paco, que tal vez espero lo mismo de un obispo joven que de uno mayor, aunque, por supuesto hay rasgos accidentales que lo diferencian. De los obispos, del más joven y el más anciano, espero siempre afabilidad, paciencia y comprensión.  El mensaje del evangelio entra así. De otro modo , nunca. Quiero para mi Iglesia, para nuestra Iglesia, obispos que escuchen, que no se pongan nerviosos por pequeñeces, que traten con mucho afecto a quien se acerca con humildad a la iglesia y con el mismo afecto a quien lo hace con soberbia y con exigencias y críticas.
   Los obispos tienen mala prensa en nuestro país. No sólo los obispos, desde luego. Como a los Obispos  se les considera desde muchos medios como  “la Iglesia”, muchas veces la prensa carga contra ella y nos reprocha de intolerantes, de interesados, de radicales…. Comprendo que son injustas casi siempre estas acusaciones. Pero sí creo  que los obispos y la Iglesia  necesitamos, a pesar de eso,  más humildad, más generosidad, más comprensión, más sencillez.
       Sí, Paco, tal vez un obispo joven tenga la obligación de aportar a la Iglesia los valores que se suponen en la juventud.
      Yo espero de un obispo joven que  facilite el diálogo con el mundo sin considerarse de otro mundo, que ya se sabe que todos estamos hechos del mismo barro. Yo espero que los obispos lleguen un día a hablar como los mortales y no se crean en la necesidad de utilizar un lenguaje rimbombante . Me gustaría que  los jóvenes facilitaran a que en la Iglesia no haya ningún tema del que esté prohibido hablar. Ni del celibato, ni de la mujer sacerdote, ni de nada. Me gustaría que los obispos jóvenes  ayudaran a rejuvenecer a la iglesia animando a trabajar más y mejor con la juventud y a permitir que el Espíritu de Dios nos abra la mente para rejuvenecer el corazón de la Iglesia. Me gustaría que los obispos jóvenes rezaran mucho, escucharan mucho. Me gustaría que que los obispos jóvenes nos enseñen a querer y respetar  al papa pero sin ser más papistas que el papa.
 Te decía al principio que lo que espero de un obispo joven es lo mismo que de uno mayor. Y es que, lo que de verdad espero es que sean buenos pastores. Que nos animen siempre, que nos traten con afecto siempre, que nos ayuden a seguir a Jesús para que en la Iglesia no nos sintamos unos más que otros. Cada uno, cumpliendo su servicio. Y el servicio de obispo y pastor es tan necesario que ojalá, sea con la edad que sea, aunque las fuerzas físicas flaqueen, nos puedan guiar con sabiduría y con ánimo .
Saludos para todos. 

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