Escribe Juan Santana (Arinaga)
A MI MODESTO ENTENDER
La mayoría de los que leen mis relatos, escritos o como le quieran llamar,
saben que pongo mi nombre al final para que nadie piense que me oculto tras
ningún “seudónimo”, aunque saben de la minusvalía que padezco.
Por eso no les deben extrañar si
les digo que me gusta escuchar los programas de televisión, pues tan solo pido
silencio a los que me rodean para concentrarme tan solo en el audio.
Pero como no es una clase de “supervivencia” lo que deseo narrar, les
explico el verdadero motivo de esto que escribo.
Resulta que hace unas dos semanas se grabó junto al muelle de Arinaga el
programa de la televisión autonómica, denominado “Noche de taifas”.
Una cosa es el día que se graba y otro el que se emite, por lo que el día 7 de Abril de 2018 pasaron dicha grabación.
Hasta ahí me parece todo correcto, pero en una de las entrevistas que
hacen, por supuesto que entre canción y canción, fue entrevistada una dama de
la cual omito su nombre, pero que si lee esto sabrá que es a ella a quien me
refiero, aunque los asistentes al programa reconocerán por lo que dijo.
A la pregunta del presentador sobre “La vará del pescao”, ella la
describió algo así como: “Es un homenaje a todos los que se dedicaban al
trabajo de la pesca en la playa y a sus mujeres que iban pregonando el pescado
con la cesta a cuestas”, añadiendo además que fue un intento de romería
marinera.
Tengo que decir ante la primera
afirmación, que eso no representa la vida diaria del marinero, ya que predomina
el alcohol y no es cierto que ellos se emborracharan a diario.
Es verdad que las mujeres llevaban el pescado en la cesta para venderlo,
aunque en honor a la verdad, en otras ocasiones era el mismo marinero el que
cargaba con la cesta para vender el producto de su trabajo, pero después de
haber estado toda la noche en la mar.
Lo de la “Romería marinera” me suena a chiste, ya que he demostrado en una
grabación con motivo de la visita de la Cadena “COPE” a la playa con ocasión de las
fiestas en honor a San Martín, donde el presidente de la Comisión de fiestas del
santo decía:
“Al acabar la fiesta, se hará un asadero de pescado en la playa, donde se
dará un brindis a los asistentes, aclarando que las bebidas han sido donadas
por varias casas comerciales, acto de nueva creación en Arinaga y que
denominarían la Bajada
del pescado”.
Por eso he dicho siempre que es una imitación de algo que se dejó de hacer
y otros copiaron para las fiestas en honor a La Virgen del Pino, aunque al
ponerle el nombre se equivocaron en una letra y pusieron una M donde deberían
haber puesto una N, por tanto ron como se consume en ese acto.
Pido disculpas por mis afirmaciones, pero en mi condición de nieto e hijo
de marineros, el sentido común me impulsa a escribir estas líneas.
Juan Santana Méndez
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