DOMINGO 2º DE CUARESMA: LA TRANSFIGURACIÓN DEL SEÑOR

DOMINGO 2º DE CUARESMA: LA TRANSFIGURACIÓN DEL SEÑOR

Este domingo leemos el evangelio que nos recuerda a Jesús que sube a la montaña (el monte Tabor) a orar con algunos discípulos. Estando en oración, Jesús se transfigura (cambia su rostro y resplandece sus vestidos). Los discípulos se sienten tan bien que Pedro, con la espontaneidad que le caracteriza dice: ¡Qué bien se está aquí, vamos a hacer tres chozas: Una para tí, otra para Moisés y otra para Elías. Ni siquiera pensó en él sino en los demás.

   Este pasaje del evangelio nos puede hacer pensar en nuestra oración. Cuando oramos de verdad, cuando nos ponemos ante el Señor...¡también nos transfiguramos! Cambiamos nuestro semblante y, mucho mejor, nuestra vida. Cuando uno está en oración, sin prisas, a gusto, también dice como Pedro: ¡qué bien se está aquí. ¡Qué bien se está en la misa, qué bien compartiendo con otros hermanos.