JORNADA DE RESPONSABILIDAD EN EL TRÁFICO
La Diócesis invita a la eucaristía y bendición de coches en la Playa de Arinaga. La diócesis de Canarias ha elegido la Parroquia de Playa de Arinaga para celebrar la jornada de responsabilidad en el Tráfico. Será el sábado 4 de Julio a las 6 de la tarde. El Vicario General de la diócesis celebrará la misa en la iglesia parroquial y al final serán bendecidos los coches que podrán aparcar en la plaza delante del mismo templo.
Este próximo fin de semana, 4 5 de julio, la Iglesia en España celebra la Jornada de Responsabilidad en el Tráfico, motivo por el cual los Obispos de la Comisión Episcopal de Migraciones han escrito un mensaje con el título “Dale color a tu vida. ¡Cuidado con los puntos negros!”.
Los obispos piden tener cuidado con los puntos negros.
En el mensaje, los obispos invitan "a una serena reflexión y a actuar juntos en este importante escenario de la movilidad". Así, ponen de manifiesto que la circulación de personas y bienes constituye uno de los fenómenos propios del mundo ya que "somos personas en movimiento, que nos desplazamos con facilidad y con frecuencia, unas veces por razones de trabajo o por otra necesidad, otras, sencillamente, por descansar, por afán cultural, por fomentar y cultivar las relaciones, por diversión".
A continuación, los obispos de la Comisión Episcopal de Migraciones muestran las cifras de accidentes ocurridos en 2008: “1,2 millones de muertos en el mundo y 50 millones de heridos debidos a accidentes de tráfico”. “Esta cifra es inaceptablemente alta”, señalan.
“En el 2015, los accidentes de tráfico podrían convertirse en la principal causa de discapacidad entre niños y jóvenes de todo el mundo. Los traumatismos causados por el tráfico son la segunda causa de muerte, en orden de importancia, de los jóvenes de 10 a 24 años de edad. De los 1,2 millones de personas que anualmente pierden la vida en accidentes de tráfico, casi la tercera parte son jóvenes menores de 25 años”, continúan.
Muchos de estos accidentes se producen en los llamados puntos negros, por lo que los obispos invitan “a un uso responsable del vehículo en la carretera, en general, pero especialmente en esos puntos donde existen más probabilidades de que se produzca un accidente”. Junto a estos puntos negros, existen otros asimilados, “tales como el uso, mientras se conduce, del teléfono móvil, el alcohol, el exceso de velocidad, la irresponsabilidad en el mantenimiento y puesta a punto del vehículo, el consumo de estupefacientes, etc. La ‘tolerancia cero’ es obligada en todos estos casos”, aseguran.
Los obispos concluyen recordando que el cristiano, “conocedor del valor que Dios concede a toda vida humana, debe poner todos los medios a su alcance para contribuir en este noble empeño de hacer de la seguridad vial un objetivo prioritario”.
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